RODEANDO LOS PICOS DE EUROPA

9 de la mañana , listos para partir …el día amaneció fresquito pero con un sol radiante preludio del calor que nos encontraríamos a lo largo de toda la jornada , cargamos de combustible a nuestra querida montura en Reinosa , y nos pusimos en marcha …

“Rodeando los Picos de Europa por las 4 provincias”…

Salimos dirección Reinosa-Espinilla , donde cogemos una estupenda carretera dirección P.Brañosera .

Ya en tierras palentinas nos encontramos a lo lejos “El Refugio Del Golobar”

El refugio alpino de Golobar fue un proyecto de Parador de Turismo y estación de esquí subvencionado por la Diputación de Palencia en tiempos de la devastadora crisis del petróleo de comienzos de los años 70. La idea surgió por el gran auge del turismo en aquella época, pero la crisis afectó seriamente a las obras y se realizaron recortes de presupuesto, por ello el edificio nunca pudo terminarse, y se encuentra en un grave estado de abandono

 

Después de disfrutar de unas estupendas vistas nos  dirigirnos hacia Berruelo donde cogimos un desvío a mano izquierda dirección a Cervera del Pisuerga , donde realizamos una paradita para almorzar .

 

  
Aquí nos liamos un poco por donde seguir pues las señales no se corresponden con lo que yo tenía marcado en el mapa, finalmente y con el mejor GPS disponible (es decir preguntando a la gente) nos dirigimos a la derecha y a menos de 100 metros coger el desvío a la izquierda  por la ruta de los pantanos tal y como nos indicaron. 
Como anécdota curiosa , comentar que nada más empezar a subir por la dicha ruta , nos encontramos con dos compañeros moteros , yo como no conocía la carretera , decidí ponerme detrás de ellos , nos guiaron por parte del camino a buen ritmo , pasamos el primer pantano ( Cervera) y en el alto del primer puerto en el mirador , nos paramos junto a ellos e hicimos las presentaciones oportunas ,les comentamos la ruta  que teníamos pensado realizar ,   uno de ellos era de la zona y nos explico muy amablemente los montes que nos rodeaban así como lo que nos esperaba de ruta hasta llegar a Riaño , desde aquí darles las gracias a los dos y mandarles un cordial saludo , da gusto encontrarse con gente sumamente amable como ellos. Decir que las vistas son exquisitas, tal y como nos comentaban que la montaña palentina es una gran desconocida para la mayoría de la gente, la verdad que lo poco que llevamos de ruta por esta zona, merece la pena pasarse por allí.

Después de las oportunas fotos seguimos nuestra ruta ya sin (nuestras liebres) , dirigiéndonos hacia el siguiente pantano  ( Embalse Camporredondo) y seguido hacia el siguiente (Embalse de Compuerto) para terminar en Velilla del Rio .Seguimos nuestra ruta sin parar para no retrasarnos demasiado dado que todavía nos quedaba mucha ruta por recorrer , comentar que esta ruta “ Ruta de los Pantanos”  es para realizarla con mucha más calma de la que nosotros la realizamos , la carretera está llena de curvas , y tiene unas vistas espectaculares . Seguro que algún día repetimos, pero más tranquilos.

Desde Velilla nos dirigimos a mano derecha hacia Riaño, que decir de Riaño, su historia, la belleza del pueblo visto a lo lejos y su pantano…para no perdérselo.

Continuamos dirección Cangas de Onis por el desfiladero de los Beyos .

(Información sacada de Internet):

En el oriente asturianos, entre el macizo occidental de los Picos de Europa y el Parque Natural de Redes, se abre el desfiladero de Los Beyos, un profundo cañón fluvial por el que discurren las aguas del río Sella, erosionando a su paso la roca cámbrica que inunda como un oleaje, esta parte de la Cordillera Cantábrica.

El Sella inicia su andadura en el puerto del Pontón, en tierras de León, pasa por Cangas de Onís, Arriondas y desemboca en el Cantábrico en Ribadelle, donde forma una hermosa ría que nos deleita con su apacible agua donde se reflejan las casas señoriales de esta villa marinera.

Entre el puente de Vidosa y  puente Angoyo, el desfiladero alcanza su máxima plenitud. Las montañas de caliza se elevan más de mil metros por encima del cauce del río Sella que discurre aprisionado, donde apenas entran los rayos del sol, lo que propicia que las verticales paredes del desfiladero hayan sido colonizadas por laureles, madroños, avellanos, hayas y otros arbustos que ofrecen un interesante mosaico vegetal, con una mezcla de especies mediterráneas y atlánticas

La vía de comunicación que une Asturias con León, abierta con penosa dificultad por el desfiladero de Los Beyos en el siglo pasado, permite acceder hasta las pequeñas aldeas situadas en las empinadas laderas de este valle, y adentrarse por caminos y veredas en el corazón del concejo, en sus frondosos bosques y el intrincado roquedo.

Decir con palabras como me suele pasar muchas veces, seria quedarme muy corto para poder describir la grandiosidad de este desfiladero, así que disfrutar de las fotos

Llegamos a Cangas ya sintiendo en nuestro cuerpo el paso de los kilómetros y en ocasiones el sofocante calor en este último tramo rodado. Aprovechamos para descansar un poco y tomar un refresco, para en poco tiempo ponernos en marcha hacia Covadonga, donde lógicamente nos dimos una vuelta para disfrutar de tan magnífico rincón.

El valle de Covadonga se encuentra situado al Norte de los Picos de Europa, o sea entre estos y el mar Cantábrico y enclavado dentro del Principado de Asturias.

Al recoger los vientos húmedos procedentes del mar recoge una gran cantidad de humedad por cuyo motivo el valle es de un verde intenso, recubierto de praderas y bosques de hoja caduca. El hecho de estar encajado entre altas montañas y el mar propicia la aparición de nieblas matutinas que se disuelven con el calor del sol, el juego de las nieblas entre el bosque le confiere al valle un aspecto de misterio o quizás de encantamiento como si habitaran en dicho valle las brujas, las meigas o los duendes.

La historia nos cuenta que el ejercito musulmán llego hasta estas tierras donde se habían refugiado un puñado de hombres que se negaban a vivir subyugados por el guerrero invasor. Dicen que un puñado de montañeses y cristianos refugiados en estas montañas y capitaneados por Don Pelayo se enfrento al ejército invasor enviado para aplastar la rebeldía de ese reducido grupo de astures.

Las tropas musulmanas que avanzaban por el valle de Covadonga fueron atacadas desde las laderas y las alturas que dominan el valle. En la cabecera del valle y en mitad de una roca vertical hay una cueva donde dicen estaba refugiado Pelayo, desde allí ataco a las tropas sarracenas derrotándolas.

Dicen que las tropas en su retirada se internaron en los Picos de Europa a través de los Lagos de Covadonga, llegando al Cares, siendo diezmados poco a poco perdidos en esas abruptas montañas.

En la cueva donde cuenta la leyenda que se refugió Don Pelayo hay una pequeña ermita que acoge a la Virgen de Covadonga, una cascada surge de dicha cueva y cae directamente en una gran poza.

Junto a la ermita y sobre una pequeña colina que preside el valle se alza el Santuario de Covadonga, construido con una vistosa piedra rojiza que contrasta con el verde de sus praderas y bosques. Por las mañanas, cuando la niebla cubre el valle de Covadonga y los duendes juegan en el bosque, es fácil ver el Santuario de Covadonga flotando sobre la niebla, como si estuviera construido sobre el aire.

Para rememorar aquella historia el Parque Nacional de los Picos de Europa ha señalizado un sendero que enlaza los Lagos de Covadonga con el Desfiladero del río Cares, parece que sigue el recorrido original que hizo el grueso del ejercito musulmán en su retirada y atraviesa bellos parajes saliendo a medio camino entre Poncebos y Cain.

Terminamos de disfrutar de Covadonga y nos pusimos de nuevo rumbo a Arenas de Cabrales , ya empezamos a notar mucho el cansancio de la jornada , sobre todo porque todavía no habíamos parado a comer algo , y era ya muy avanzada la tarde , llegamos a Arenas y paramos en un bar/tienda desde donde se divisa una panorámica de los picos esplendida , casi tan esplendida como el queso de cabrales con pan y las patatas fritas con crema de queso ….esto , esto , esto nos hizo renacer , es como si nos hubieran rellenado con gasolina 98 …que digo …con queroseno de algún reactor …buff…   magnifico.

Decidimos seguir el camino hacia Reinosa por el camino más espectacular, sin prisa alguna nos dirigimos hacia Panes, y de ahí girar a la izquierda para, después de unos 5 km, tomar un desvío hacia Merodio para seguidamente continuar hasta Puentenansa, Carmona y Cabuerniga, no sin antes parar en el Mirador o Asomada del Ribero, con unas vistas extraordinarias.

Nos adentramos en el Parque natural del Saja-Besaya para adentrarnos en lo hasta el día de hoy…es el tramo que más he disfrutado en moto, tanto en la conducción como en las “tremendas “vistas de la subida del Puerto de Palonbera hasta Soto. Y me explico, desde que salimos de Arenas de Cabrales, poco a poco el tiempo fue cambiando de forma muy rápida, como suele ser normal en esta zona, llegado incluso en algún momento a sentir algo de frio, pero según íbamos subiendo y disfrutando de la preciosa carretera, nos fuimos elevando por encima de las nubes, con lo que la vista que en ese momento nos regalo la naturaleza fue esplendida, indescriptible.

Llegamos a Soto, un pueblecito ya cerca de nuestro destino, Reinosa, allí se encuentra el bar/alberge, el montero, con un interior de lo más pintoresco y curioso que conozco.

 Despedida

Llegados ya a nuestro destino poco a poco vas asimilando lo visto a lo largo del día, han sido 350 km de maravillosa ruta, rodeando los Picos de Europa, y disfrutándola en todo su esplendor que difícilmente se podrá borrar de nuestra cabeza.

Dejamos la casa de nuestra anfitriona (Cristina muchas gracias por tu hospitalidad) al día siguiente para dirigirnos ya sin ninguna prisa a nuestra casa, eso sí, parando en un sitio al pie del Pantano del Ebro a desayunar como Dios Manda…y como siempre…que vistas….

                                                                              

                              UN SALUDO A TODOS NUESTROS SEGUIDORES